viernes, noviembre 24, 2017

Coleccionable DC Comics. Novelas Gráficas: Errores (1)

En esta nueva serie de entradas señalo los errores que hay en el coleccionable DC Comics. Novelas Gráficas, de Salvat. De momento, tengo los 17 primeros números, por lo que solo puedo analizar estos. Como se puede ver, son errores de todo tipo y que se encuentran en diferentes partes de los cuadernos.

Mosaico de la colección.


BATMAN: SILENCIO I

INTRODUCCIÓN

Primer párrafo

“Silencio ha pasado a la posteridad como una de las mejores historias de Batman jamás contada…” Es “contadas”, en plural.


BIOGRAFÍAS

Primer párrafo

“… ¡Los investigadores de lo desconocido deben morir!…” Los Investigadores de lo Desconocido, como Liga de la Justicia o Superman, es un nombre propio y, por tanto, debe comenzar en mayúsculas. A todo esto, me llama la atención que aquí se ha traducido el título al castellano y, en cambio, en otro libro se deja en inglés.

“También ha escrito Batman/Superman…” Es Superman/Batman.


Segundo párrafo

“… Batman All Star…” Es Batman All-Star, con un guion. Este error se repite en el tercer párrafo.


Tercer párrafo

“… WILDC.A.T.S…” En realidad, es WildC.A.T.S.


BATMAN: SILENCIO II

INTRODUCCIÓN

Primer párrafo

“… R’as al Ghul…” Es Ra’s al Ghul.


BIOGRAFÍAS

Se repiten los mismos errores que en el libro anterior.


SUPERMAN: TIERRA UNO

INTRODUCCIÓN

Primer párrafo

“Hacer una nueva versión de la familia de Kal-El: el único superviviente…“ Esta frase parece metida con calzador. Como si fuera una traducción literal del inglés. Supongo, por lo que se dice antes en este párrafo, que lo que quiere decir es que el objetivo de J. Michael Straczynski era hacer una nueva versión del origen de Kal-El.

“Straczynski revitalizó a Clark Kent para un nuevo tipo de audiencia”. Es correcto decir “audiencia”, pero… ¿por qué no “público” o “lector”? Es más natural. Al fin y al cabo, la audiencia se suele relacionar con los medios audiovisuales, como la tv o la radio, cuando aquí hablamos de un medio impreso.


Segundo párrafo

“… Daily Planet… Planet…” Estas palabras están puestas en cursiva. No me parece correcto. Los nombres propios no se deben poner en cursiva.


Tercer párrafo

“… después de ver como Jimmy…” El “como” lleva acento.


BIOGRAFÍAS

Primer párrafo

“… Los cuatro fantásticos…” Es Los Cuatro Fantásticos. Es curioso porque, en el libro JLA: Torre de Babel, sí está bien escrito.


Tercer párrafo

“… Birds of prey…” Es Birds of Prey.

“… Las aventuras de Superman…” Es mejor mantener el título en inglés. Explico el porqué varias veces a lo largo de este documento.

“… Superman: Tierra uno…” Está bien escrito, con la palabra “uno” en minúscula. Pero ¿por qué en el resto de textos de este libro aparece como “Tierra Uno”?


Cuarto párrafo

“… Bruce Wayne: El regreso…” Es El regreso de Bruce Wayne.


LA HISTORIA HASTA EL MOMENTO

Primer párrafo

“… la Época Dorada…” Esto lo explico varias veces. La traducción de Golden Age puede ser Época Dorada, Época de Oro, Edad Dorada, Edad de Oro, Era Dorada, Era de Oro… La que sea. Pero si elegimos una opción, habrá que mantenerla en todos los libros. No puede ser que cada vez sea de una forma distinta. Lo sorprendente es que en este mismo párrafo se dice también “la Época de Oro” y “la Edad de Plata” (Silver Age).


Segundo párrafo

“La introducción… introducida…” Queda mal repetir una palabra en una frase. En este caso, en lugar de “introducida”, se podía haber puesto “que apareció”.

“… en La Liga de la Justicia de América número 21”. Como explico en otras partes de este documento, está bien usar “número” y a continuación indicar el número en cuestión. Pero si utilizamos esta construcción, mantengámoslo. No lo cambiemos aleatoriamente por “#”.


Tercer párrafo

“En 2006, Tierra Uno se reinicia con la nueva serie de los Nuevos 52…” Esto no es cierto. Está mal escrito por Eaglemoss o la traducción es poco acertada. En 2006 se recuperó el multiverso con 52 tierras paralelas, sí. Y una de ellas es Tierra Uno. Pero el concepto “Nuevos 52” (The New 52) hace referencia al relanzamiento que hubo en 2011, y por el que DC recreó muchos de sus personajes. El error está en que da a pensar que The New 52 empezó en 2006, cuando lo hizo en 2011.


EL ORIGEN DE SUPERMAN

Antes que nada, me llama la atención el gigantesco SUPERMAN NÚM. 1. En otros libros, se utiliza la almohadilla. Hay que usar siempre el mismo recurso para guardar un estilo homogéneo en el producto.

lunes, noviembre 20, 2017

Los episodios perdidos (8)

JLA Secret Files and Origins nº 2 (1998).
La Liga de la Justicia de Grant Morrison sufre una maldición en España: se ha publicado cuatro veces y ninguna es "la edición definitiva". Primero fue Vid, luego Norma, después llegó Planeta DeAgostini y, más recientemente, se ha unido ECC. Todas estas editoriales han publicado la etapa del guionista escocés en JLA, y aunque la edición de ECC es, sin duda, la mejor de todas, tiene un pequeño fallo: se salta el segundo número de JLA Secret Files and Origins.

Los Secret Files and Origins eran unos cómics bastante particulares, ya que presentaban historias, pero también fichas de personajes. Se podría decir que eran una mezcla entre los Annuals y los Who's Who. Generalmente, las fichas ofrecían información muy superficial, siendo más interesantes cuando estaban dedicadas a otros elementos (la Torre de los Titanes, por ejemplo), aunque al menos estaban contaban con buenas ilustraciones. Sobre las historias, podía haber varios relatos de unas pocas páginas, algunos totalmente prescindibles y otros bastante necesarios por complementar las series regulares.

En el caso de JLA Secret Files and Origins nº 2 (agosto de 1998) nos encontramos con una historia titulada Heroes, a cargo de Christopher Priest y Yanick Paquette, en la que la Liga amplia sus filas con nuevos miembros. Si atendemos a las ediciones de Norma, se sitúa entre La Roca de los Tiempos y La unión hace la fuerza, ya que al término de un comic Superman habla de la necesidad de nuevos leaguers y en el siguiente ya han sido reclutados. Por tanto, se trata de una historia relevante, pues se sitúa en un punto intermedio presentando el fichaje de Hipólita, entre otros personajes.

Si nos fijamos en el recopilatorio americano (Strength in Numbers), esta historia está incluida junto al especial Prometheus y los números 16 al 23 de JLA. Sin embargo, cuando Norma publicó este tomo en La unión hace la fuerza, la omitió. ¿Por qué lo hizo? Supongo que para reducir el número de páginas y, en consecuencia, el precio, que ya de por sí era bastante alto (20 euros). Al tratarse de un relato escrito por Priest, y no por el propio Morrison, Norma debió considerar que no era "un imprescindible".

Planeta publicó un libro en formato ómnibus (muy gordo, para que nos entendamos) que, al parecer, sí la incluye. De hecho, sería la única edición española que lo hace. Pero... tiene el fallo de que omite los episodios escritos por Mark Waid, los cuales aparecen en otro libro, rompiendo el orden en que originalmente se publicó todo este material. Debido a esto, considero que tampoco alcanza la excelencia. Así que si una edición es mejor en un aspecto, es peor en otro.

domingo, noviembre 19, 2017

[Reseña] Solo nº 1

Guion: Tim Sale, Darwyin Cooke, Diana Schutz, Jeph Loeb y Brian Azzarello
Solo nº 1 (PdA).
Dibujo: Tim Sale
Portada: Tim Sale
Edición española: Planeta DeAgostini, 2004. 3,95 €.
Contiene Solo nº 1.

★ ★ ★ ★ ★ Me ha gustado mucho

DC Comics se ha caracterizado tradicionalmente por ofrecer todo tipo de géneros y por omitir la continuidad en favor de la historia, siendo algunos de los rasgos que la diferencian de la maravillosa compañía. Esto se puede ver en Solo, una serie con estilo, personal... cada número está dedicado a un autor, algunos de los mejores de los últimos años, quien puede contar historias con libertad creativa. El primero es Tim Sale.

Este cuaderno contiene seis historias. La primera es Cita con el Caballero Oscuro, en la que Batman pilla a Catwoman durante un atraco y ambos terminan en la típica persecución entre azoteas. Como es habitual en la felina, hay flirteo y mucha sensualidad. El guion de Darwyn Cooke es funcional y apenas destaca en nada, siendo lo más importante el arte. Si gustan cómics como Si vas a Roma, es estupendo volver a ver a estos personajes dibujados por Sale.

En segundo lugar hay un breve relato titulado Christina, de apenas cinco páginas, que en este caso está escrito por el propio Sale, va en blanco y negro y no lo protagoniza ningún personaje conocido, sino una pareja de enamorados. El final, que llega de forma abrupta, busca dejar poso, aunque por la brevedad es difícil identificarse con los personajes. Al menos, se puede disfrutar con los grises en las acuarelas de Sale.

A continuación está Amor de juventud, una historia que por la forma del rótulo o el coloreado en puntos nos retrotrae a los viejos cómics de los años 50. De hecho, la protagonista es Supergirl, concretamente en la versión original, cuando tenía la identidad de Linda Lee Danvers. Como se puede ver, Sale se permite tratar a personajes que ya están fuera de continuidad.

En este punto se empieza a ver el denominador común en todas las historias: el amor. Está la relación imposible entre Batman y Catwoman, la de Supergirl y un noviete de la infancia... Las tres siguientes historias siguen tratando el mismo tema. En La noche del baile Sale se reencuentra con Jeph Loeb y el mundo de Las cuatro estaciones, concretamente en qué pasó antes de la primera cita entre Clark Kent y Lana Lang. Luego viene Una jugada peligrosa, ahora con guion de Brian Azzarello, un breve relato de estilo noir que presenta a un asesino y un viejo amor. Y, por último, Pienso en ti, donde Sale cuenta otra historia de amor, esta vez basada en la vivencia de sus propios padres.

Así que aunque cada historia es independiente, está protagonizada por personajes diferentes y ni siquiera están en una continuidad en particular, todas tienen la misma temática. Con esto como base, Sale ofrece distintos enfoques y, en consecuencia, distintos estilos gráficos. Al final, casi diría que esto es lo más importante, ya que la calidad de las historias es dispar, sin ser sobresalientes en ningún caso.

LA EDICIÓN ESPAÑOLA

Planeta DeAgostini publicó esta serie en formato "ultimate", esto es con unas dimensiones superiores a las típicas en el comic-book. Hay dos historias de este primer número que se han reeditado posteriormente: Cita con el Caballero Oscuro en el libro Batman: Ego y otras historias (Planeta DeAgostini, 2009), y La noche del baile en Superman: Las cuatro estaciones (ECC, 2015).

viernes, noviembre 17, 2017

Mis compras en noviembre de 2017



  • Blanco Humano: Montaje Final 
  • Batman: Detective Comics nº 3 
  • Clásicos DC: Kamandi 2, 5
  • Green Arrow y Canario Negro nº 2, 3, 4
  • El Escorpión nº 1
  • Jaque Mate nº 1-2
  • JLA: Un millón
  • JLA: One Million
  • JLA: Justice For All
  • JLA: III World War
  • JLA nº 6 (La pena de los dioses)
  • Solo 1
  • Supergirl y la Legión de Superhéroes: La búsqueda de Cósmico
  • Superman: Fin de Siglo
  • Superman: Un año después
  • Titanes / Legión de Superhéroes: Universo en llamas

jueves, noviembre 16, 2017

[Reseña] JLA: Escalera hacia el cielo

JLA: Escalera hacia el cielo (PdA).
Guion: Mark Waid
Dibujo: Bryan Hitch
Portada: Bryan Hitch
Edición española: Planeta DeAgostini, 2006. 7,95 €.
Contiene JLA: Heaven's Ladder.

Antes que nada, decir que si crees que el título de esta entrada está mal escrito, porque el comic se titula Escalera al cielo, que sepas que lo he puesto así por la edición de Planeta DeAgostini, donde se tradujo Heaven's Ladder de esta forma. No tiene mayor importancia, porque en ambos casos se entiende el significado, pero a mí me suena mejor Escalera hacia el cielo. Tal vez por que yo tengo esa edición, ya estoy acostumbrado... En cualquier caso, la edición de ECC es básicamente igual, excepto por la encuadernación en tapa dura, el precio (12,95 euros) y el diseño de la portada.

Escalera hacia el cielo surgió en una época en que la Liga de la Justicia solo contaba con una serie regular (JLA), en contraposición a unos años de sobreexplotación, pero en la que aun así salían otras historias en forma de miniseries o números únicos, como este comic. Eso sí, se trata de un producto diferente al resto por varias razones. Para empezar, es una auténtica novela gráfica, por lo que el formato tiene unas dimensiones superiores a las típicas del comic-book. En segundo lugar, el guion corre de Mark Waid, uno de los mejores escritores del medio, y que ya se había ocupado de unos cuantos números de JLA. Y por último, el dibujo está firmado por Bryan Hitch, que por entonces se había convertido en una estrella por su trabajo en The Authority. A todo esto cabe añadir que Escalera hacia el cielo era un anticipio de una etapa de estos dos autores en la serie regular de la Liga... pero como finalmente fue una decepción, casi se puede decir que esta novela es lo mejor que salió del proyecto.

Si se sigue poniendo en contexto este comic, se pueden ver dos puntos que influyen la concepción del mismo. Por una parte, está la idea de que la historia debe ser gigantesca, por influencia del trabajo de Grant Morrison en JLA, donde cada amenaza era superior que la anterior. Y por otra, la necesidad de hacer una historia realmente impactante para aprovechar el talento de Hitch. En base a esto, Waid no se anda con medianías: unos dioses primigenios están muriendo, quieren crear un Cielo y para ello secuestran la Tierra. Así que tenemos a la Liga en una aventura para salvar nuestro mundo, la cual le lleva por todos los rincones del universo y que requiere de la participación de todos los miembros.

Waid, lejos de ser un Jeph Loeb cualquiera, no se limita a escribir cuatro diálogos y a dejar que el peso de la historia lo lleve el dibujante estrella, sino que guarda su posición y busca que el guion tenga cierto trasfondo. Teniendo en cuenta el argumento, que está relacionado con la creencia de que hay un más allá, y de que los seres que lo buscan han alcanzado un nivel tecnológico que está fuera de nuestra concepción, Waid plantea puntualmente reflexiones sobre las religiones e intenta justificar científicamente algunas de las cosas que pasan. Así que no es solo un comic "para ver", sino que también ofrece una buena lectura. Personalmente, en algunos momentos el guion me parece cargante, sobre todo por la explicación de qué es la amenaza, pero también tiene buenos y agradables pasajes. Además, también aprecio su voluntad por dar un papel relevante a todos los personajes en un momento u otro. En definitiva, no es el mejor trabajo de este guionista, pero tampoco merece la mala valoración que le han dado en otros medios.

En cuanto a Hitch, aquí tenemos al artista en su época posterior a The Authority, cuando había adaptado el formato widescreen del cine a la narración en viñetas, y previo a The Ultimates, por lo que aún no estaba preocupado por detallar en exceso los rostros u otros elementos. Si The Ultimates es su mejor trabajo, este puede ser el siguiente perfectamente. Hay páginas verdaderamente espectaculares, la narración es fluida... Poco o nada malo se puede decir, la verdad.

LA EDICIÓN ESPAÑOLA

La edición original luce el gigantesco formato treasury, concretamente unas dimensiones de 34,29 x 25,4 cm, mientras que la edición de Planeta es un poco más pequeña: 28 x 21 cm. 

lunes, noviembre 13, 2017

[Artículo] El eterno Año Diez (1)

Antiguamente, los guionistas y editores de DC Comics no se preocupaban en exceso por la continuidad. Así es que se daban incoherencias, como que Wildcat, un personaje original de Tierra Dos, salía así sin más un número de The Brave and the Bold con el Batman de Tierra Uno. O que Atlantis aparecía en los cómics de Aquaman y de Superman, pero no parecían ser el mismo mundo. En lo que se refiere a la cronología pasaba algo parecido: personajes como Batman o Superman aparentaban tener siempre unos 29 ó 30 años... pero si se toma como referencia la primera aparición de la Liga de la Justicia, que se dio en 1960, en los ochenta ya deberían ser unos quincuagenarios. Lo mismo le pasa a héroes juveniles como Robin o Wonder Girl, que en las primeras aventuras de los Jóvenes Titanes, que también datan de los años sesenta, debían tener unos 13 ó 14 años, y en la mencionada década serían unos cuarentones. Sin embargo, esto no era así.

Tales of the Teen Titans nº 50 (1985).
Esto evidencia que el tiempo en los cómics no transcurre al mismo tiempo que en el mundo real. Y tiene sentido porque, por ejemplo, una historia de seis números, que para el lector supone seis meses, se puede desarrollar en apenas unas pocas horas en la vida de los personajes. Pero, además, también apunta la necesidad de mantener a los personajes "atrapados en el tiempo", con el fin de que permanezcan jóvenes y vitales. Curiosamente, mientras que los héroes juveniles podían pasar de la niñez a la madurez, los adultos estaban estancados en esos 29 ó 30 años. Porque una cosa es que Batman sea un anciano en una historia alternativa y puntual, como El regreso del Caballero Oscuro, y otra que lo sea en las series regulares. Así es que mientras que Robin maduraba adoptando la identidad de Nightwing o Wonder Girl se casaba, Batman o Wonder Woman siempre estaban en el mismo punto.

Independientemente de la inamovible edad de Batman o Superman, en la continuidad previa a Crisis en tierras infinitas estaba claro que los superhéroes llevaban muchos, muchos años en activo. Tanto es así que si Wonder Woman rescató a un bebé de un edificio en llamas, que terminó siendo Wonder Girl, que se casó siendo adulta... es evidente que, como mínimo, habían pasado unos 18 años. Este periodo de tiempo, que podría ser incluso un poco más amplio, era realmente apropiado para ubicar todas las historias sobre el Universo DC que se habían publicado desde los años sesenta hasta los ochenta. Marv Wolfman, uno de los pocos guionistas interesados en tratar en detalle la cronología, no tenía reparo en decir, en boca de Robin o Wonder Girl que habían pasado muchos años desde que fueron acogidos por sus respectivos mentores. Irónicamente, fue el propio Wolfman quien terminó provocando cierto caos al respecto.

DESPUÉS DE CRISIS EN TIERRAS INFINITAS

A Wolfman no le gustaban las incoherencias que había en el Universo DC, el cual se había desarrollado a trompicones por contar con editores hechos a la vieja usanza, estar en manos de autores poco capaces o por la inclusión de personajes de otras editoriales. DC parecía el monstruo de Frankenstein, donde se suponía que convivían los dioses griegos de los cómics de Wonder Woman y los Nuevos Dioses de Jack Kirby, pero estos no tenían ninguna relación. La idea de Wolfman era verdaderamente radical: en Crisis las tierras paralelas se fusionarían en una sola y la continuidad empezaría de cero. Es más, él quería que todas las series regulares fueran canceladas y lanzadas de nuevo, pero desde el número 1. Al final, el guionista tuvo que negociar esto con los editores, que no veían con buenos ojos algunas medidas, y se quedó en un punto intermedio.

El multiverso se fusionó, sí, muchas series fueron canceladas... pero la continuidad no empezó de cero, sino que siguió adelante dejando abierta la posibilidad de cambios de forma retroactiva. Esto significa, por ejemplo, que si a mediados de los ochenta Jason Todd era el segundo Robin, seguiría siéndolo en los cómics ubicados en la nueva continuidad. Pero si el guionista quería cambiar su origen, podía hacerlo, y esto se veía reflejado en los nuevos cómics, anulando de paso el viejo origen y aquellos cómics. Este complicado mecanismo se ideó con el fin de no renunciar a personajes y series que funcionaban muy bien (los Nuevos Titanes o los Outsiders), a la vez que se podían hacer cambios en mayor o menor medida.

Uno de los autores que aprovechó estas circunstancias para cambiar el origen del mismísimo Batman fue Frank Miller. En 1987 contó el origen definitivo de este personaje en la historia Año Uno, la cual transcurre durante el primer año de actividad de este personaje. El título tiene pleno sentido, ya que la historia se desarrolla realmente a lo largo de los doce meses de un año. Sin embargo, al término de este relato, que se publicó originalmente en Batman nº 404-407, el siguiente número no se sitúa inmediatamente después de lo que se había contado, sino mucho más adelante: Dick Grayson, que es Robin, discute con Batman, y habla de "buscar su propio destino" (una referencia a independizarse como Nightwing), a lo que poco después se añade que Batman conoce a Jason Todd y lo acoge como el nuevo Robin.

Batman nº 408 (1987).  

A la vista de estos datos, y si tenemos en cuenta que en Año Uno aún no había aparecido Dick, y que cuando lo haga debe permanecer varios años con Batman para afianzar la leyenda del Dúo Dinámico, se sobreentiende que entre los números 407 y 408 hay un periodo de tiempo muy amplio. Es más, si Dick aún es Robin, mientras que en los cómics de los Nuevos Titanes es Nightwing desde 1984, se comprende que el número 408 es previo a aquellos. Es un complicado rompecabezas que se puede aclarar fechando los acontecimientos: la historia de Miller transcurre en Año Uno, la discusión entre Bruce y Dick se puede dar a principios de Año Diez, siendo que poco después Jason se convierte en Robin y Dick en Nightwing... entre Año Dos y Año Nueve hay un periodo amplísimo para ubicar aventuras de Batman en solitario y ya acompañado con Robin. Ese hueco es rellenado con los cómics previos a Crisis, siempre y cuando no entren en conflicto con las nuevas historias.

Pero ¿por qué Año Diez, y no Año Cinco o Año Quince? Si en la continuidad anterior a Crisis se podían estimar, recordemos, un mínimo de 18 años de actividad superheroica, ahora se reducen los tiempos con el fin de este nuevo Universo DC sea más accesible, pero al mismo tiempo se deja un margen amplio para que ahí tengan lugar todos los cómics previos a Crisis que siguen siendo canónicos (el Cuarto Mundo de Kirby, por ejemplo). La idea del Año Diez no es una simple teoría, sino una referencia que se puede encontrar en multitud de cómics. En Batman: The Cult nº 4 (1988), por ejemplo, se dice "Durante casi una década he sido el invencible Batman. Diez años de eludir las garras de la muerte". Esta referencia evidencia que el Hombre Murciélago lleva diez años en activo en el momento en que transcurre esta historia.

Como la primera aparición de Batman se da al mismo tiempo, aproximadamente, que la de Superman, se sobreentiende que el Universo DC en general también empezó hace una década. Así que los cómics que se publican de 1987 en adelante y que tienen lugar en el presente, se ubican en Año Diez. En cuanto a la edad, Si Batman y Superman debutaron con 24 ó 25 años, en estos momentos tendrían unos 34 ó 35, que dentro de lo que cabe no se aleja de los 29-30 eternos que tenían antes antes de Crisis. En cualquier caso, la edad de estos personajes también se mantiene estancada de forma artificial.

sábado, noviembre 04, 2017

[Reseña] Wonder Woman: Odisea

Wonder Woman: Odisea (ECC).
Guion: J. M. Straczynski y Phil Hester
Dibujo: Don Kramer y otros
Portada: Josh Middleton
Edición española: ECC Ediciones, julio de 2017. 32,50 €.
Contiene Wonder Woman nº 600-614.

★ ★ No me ha gustado

Odisea fue publicado por primera vez en España en dos tomos, uno de Planeta DeAgostini y otro de ECC, siendo el primero bastante difícil de encontrar, como casi todo el material que salió en 2011. Debido a esto, no pude leerlo, ni mucho menos comprarlo, y me quedé a la espera de que ECC lo recuperase íntegramente, como así lo hizo este año en un libro enmarcado en la colección Grandes Autores de Wonder Woman. Debo decir que no me preocupaba en exceso por conseguirlo, pues siempre había leído críticas negativas, y el paso de J. M. Straczynski por Superman, que es paralelo a la etapa en Wonder Woman, sí lo había leído, y no me pareció una maravilla precisamente. Pero entre la curiosidad y el completismo... ya tengo Odisea en mi estantería.
SINOPSIS: Antaño fue la mayor superheroína del mundo, la embajadora de las amazonas y miembro medular de la Liga de la Justicia. No obstante, el mundo se ha olvidado de Wonder Woman, que ahora emprende un viaje a lo largo del cual deberá recuperarse a sí misma y también resolver el principal misterio de su actual situación: ¿quién ha destruido Isla Paraíso?
Por dejarlo claro: el título está realmente bien elegido, ya que es una auténtica odisea leer este comic. Lento, aburrido, liado... en muchos momentos me dieron ganas de dejarlo. Curiosamente, eso es lo que hizo Straczynski cuando solo había escrito seis números: dejarle el marrón a Phil Hester, que se convirtió en el co-guionista de la obra, en un nuevo desplante del guionista (anteriormente, ya lo hizo en Supreme Power o Thor). Las malas lenguas dicen que cuando Straczynski supo que DC iba a reiniciar su universo (The New 52) dijo "¿y para qué voy a perder el tiempo con esto, si quedará fuera de la continuidad?". Es bastante irónico, teniendo en cuenta que él mismo se la salta a la torera al presentar aquí una versión alternativa de Wonder Woman... por que para qué vas a calentarte la cabeza respetando la continuidad si puedes empezar de cero.

Straczynski plantea un reinicio: se ignora todo lo que ha pasado anteriormente, de forma que la carrera de Wonder Woman comienza aquí mismo, y está todo por presentar, desde el descubrimiento del Mundo de los Hombres a los personajes secundarios o los villanos. Para los lectores nuevos es estupendo, pues se pueden subir al carro sin perderse nada, y también para el propio guionista, que no tiene que lidiar con la continuidad establecida. Sin embargo, este tipo de cambios se suelen deber a algo (un viaje en el tiempo, por ejemplo), y aquí Straczynski asusta porque no parece tener un as en la manga, al menos durante buena parte de la trama... y cuando revela la carta ganadora, es tan decepcionante que cuesta creer que ha necesitado tantos episodios para contar lo que tenía que contar.

Straczynski le exijo más que a otros guionistas porque realmente creo que es capaz de ello. Aquí empieza fuerte, con Isla Paraíso derrumbada, las amazonas siendo perseguidas y un gran villano en las sombras... pero a medida que pasan las páginas, la historia pierde fuelle. Peor aun, avanza gracias a golpes de suerte: "como sé que estos tipos me están vigilando, voy a ponerme encima de su furgoneta y llegaré hasta su cuartel", "como estos bichos han salido del agujero, voy a entrar y llegaré a donde quiero"... Todo es casual. Las cosas pasan porque tienen que pasar así para ir al siguiente punto. Y el villano... ay, el villano. Parecía que teníamos "el Morlun de Wonder Woman", un personaje enigmático y amenazante, con una estética llamativa (desnudo, desfigurado, ardiente), y al final se queda en otro de usar y tirar.

Por último, hay que decir que los dibujos no ayudan: Don Kramer, aunque no es nada del otro mundo, hace un trabajo cumplidor. El problema está en que apenas se ocupa unos pocos episodios y el resto queda en manos de otros artistas con aun menos talento. De hecho, la recta final del libro la dibuja Lee Garbet, tal vez uno de los peores artistas en DC de los últimos tiempos... debe ser un buen amigo de sus amigos para conseguir estos encargos. Así que en lo que se refiere a la parte visual, tampoco estamos precisamente ante una gran obra.

LA EDICIÓN ESPAÑOLA

Este tomo de ECC contiene el número 600 de Wonder Woman, pero solo la historia que está escrita por Straczynski. El resto, que son otras historias cortas e ilustraciones varias, y que no tienen relación con esta saga, se han omitido. Así que si queremos tener este material tenemos que buscarlo en Wonder Woman nº 1 de Planeta DeAgostini, donde sí está íntegramente el número 600, solo que en este caso repetiremos los primeros episodios de Odisea.

Por otra parte, en esta edición de ECC echo en falta los textos que escribieron Straczynski sobre la obra y Jim Lee sobre el nuevo traje de Wonder Woman, y que se publicaron originalmente en el número 600. Es un pequeño complemento que debe ser incluido en una edición que, se supone, es de lujo. Por lo demás, es lo que cabe esperar: historia completa, portadas al principio de cada episodio, portadas alternativas al final del libro...