martes, noviembre 05, 2019

[Reseña] Batman: Juegos de Guerra nº 1

Juegos de Guerra nº 1 (PdA).
Guion: Ed Brubaker, Bill Willingham, Devin Grayson, Andersen Gabrych, Dylan Horrocks, A.J. Lieberman
Dibujo: Mike Lilly, Sean Phillips, Pete Woods, Paul Gulacy, Al Barrionuevo, Ramón Bachs, Giuseppe Camuncoli, Kinsun, Brad Walker
Portada: James Jean
Edición española: Planeta DeAgostini, 2006. 12,95 euros.
Contiene The 12-Cent Adventure, Detective Comics núm. 797, Batman: Legends of the Dark Knight núm. 182, Nightwing núm. 96, Batman: Gotham Knights núm. 56, Robin núm. 129, Batgirl núm. 55, Catwoman núm. 34, Batman núm. 631.

★ ★  No me ha gustado

Juegos de Guerra es una historia que se publicó originalmente en 2004 en las series regulares de Batman y personajes relacionados. Por entonces, las series del Hombre Murciélago aún estaban enmarcadas en el relanzamiento que se había iniciado con el comienzo del nuevo siglo, el cual se caracterizó por recuperar el espíritu de Año Uno con historias más realistas, terrenales y detectivescas. Con dicho enfoque se publicaron sagas cercanas al género negro, como Agente herido. Y aunque se vio interrumpido abruptamente por Silencio, pronto se volvió al redil. A todo esto, habían pasado dos años desde el último cruce (Bruce Wayne: Fugitivo), por lo que era un buen momento para reunir de nuevo todos los títulos. Los responsables de la franquicia recurrieron a la guerra entre bandas mafiosas, un tema manido pero que encajaba perfectamente con la filosofía de la etapa.

SINOPSIS: Las grandes familias criminales de Gotham City acuden a una cita a la que han sido misteriosamente convocadas. El miedo, las sospechas y la paranoia acaban por echarlo todo a perder y el aire se llena de balas. Varios señores del crimen caen en la reyerta mientras una nueva ola de caos se apodera de la ciudad. Batman deberá recurrir a todos sus efectivos disponibles (Oráculo, Batgirl, Nightwing, Orfeo, Ónix y Tarántula) para salvar tantas vidas como pueda y minimizar los conflictos, al mismo tiempo que trata de averiguar quién maneja los hilos de la destrucción que se ha desencadenado.

La saga se estructura en tres ciclos argumentales siendo el primero Estallido. Se inicia en el comic The 12-Cent Adventure, el cual salió con el módico precio de 12 centavos de dólar, o sea, prácticamente gratis, y que sirvió para animar a los lectores a seguir la historia. Este comic, por su carácter promocional y enfocado a personas ajenas al mundo de Batman, repasa momentos pasados en la historia del personaje, por lo que un lector con poco bagaje puede acercarse con tranquilidad a la saga. Aquí se explica, por ejemplo, que Stephanie Brown, también conocida como Spoiler, había asumido el papel de Robin pero que finalmente fue despedida por Batman. Si el lector quisiera saber más al respecto, el material se encuentra en el tomo Robin: Desenmascarado, aunque realmente no es necesario leerlo. En cualquier caso, Spoiler tiene un papel fundamental en el evento, por lo que no es casualidad su aparición en este capítulo de apertura.

A partir de aquí se desarrolla la guerra de bandas, entre los que se encuentran personajes tan conocidos como el Pingüino o Scarface, y otros de nuevo cuño, como Alexandra Kosov. Este personaje, por cierto, es la heredera de la banda rusa Odessa, la cual debutó en Detective Comics nº 742 (marzo de 2000)... que fue, precisamente, el primer cómic de esta etapa, y sirve para evidenciar que la saga se enmarca en este periodo iniciado por Greg Rucka. Se cumple con el cliché de que hay bandas rusas, chinas, latinas... lo típico en este tipo de historias, solo que aliñado con los villanos coloridos de Gotham City. La idea es buena, aunque no muy original, ya que, por ejemplo, en los cómics de Spiderman de los años 80 ya hubo una guerra de bandas. Sin embargo, es un tema que siempre es interesante y que, sin duda, encaja con lo que puede ser un comic de Batman.

Uno de los primeros fallos que se puede detectar en este evento es la falta de contexto: ¿quiénes son todos estos criminales? ¿Qué partes de Gotham controlan? ¿Se diferencian en algo sus negocios turbios? ¿Tienen cuentas pendientes? Evidentemente, no hace falta explicar quién es el Pingüino, tampoco Scarface, pero... a falta de más información todos estos personajes son prácticamente intercambiables. En el segundo episodio parece haber un intento de dar cuerpo a todo esto, pero los siguientes se vuelcan en la acción y ya da igual que sean rusos que chinos. Básicamente, son tipos con pistolas que están enfrentados porque así lo manda el guion.

A todo esto, la historia se desarrolla de forma lineal pasando de episodio a episodio sin importar de qué serie se trate. Así, por ejemplo, el final de un Shadow of the Bat conecta directamente con el inicio de un Robin. Sin embargo, a partir de dicho episodio de Robin, vienen otros dos (uno de Batgirl y otro de Catwoman) que en lugar de seguir adelante, dan un paso atrás para mostrar hechos previos o paralelos al del capítulo mencionado. Debido a esto, no forman parte de un todo, sino que tienen voz propia. Esta molesta interrupción se podía haber evitado distribuyendo los contenidos de otra forma. Por ejemplo, si Catwoman mantiene una conversación con Spoiler, esto no tiene por qué pasar necesariamente en Catwoman. En cualquier caso, al término de estos cómics se vuelve a encauzar el curso de la historia, ya que ambos llevan al mismo punto.

Como es habitual en este tipo de cruces, los guiones y los dibujos pasan por demasiadas manos y se nota que el estilo cambia a cada episodio. Suele pasar que hay autores que sobresalen sobre otros, de manera que hay episodios mejores que otros, pero en este caso hay una mediocridad uniforme de principio a fin, especialmente en lo que se refiere a los guionistas. Si acaso, el trabajo de Pete Woods es visiblemente superior al del resto de los artistas, ya que el estático Sean Philips desentona en una serie de estilo dinámico como Batgirl y Paul Gulacy no molesta pero tampoco apasiona en Catwoman. Quien se lleva la palma es Giuseppe Camuncoli, que con un estilo casi caricaturesco rompe con la sobriedad de un evento de este calibre. Tampoco Ramón Bachs y Al Barrionuevo están acertados, aunque en el caso de este último su larga estancia en Gotham Knights ya demostró que aún le faltaban muchas páginas para mejorar.

LA EDICIÓN ESPAÑOLA

Juegos de Guerra cuenta con dos ediciones españolas. La primera fue publicada por Planeta DeAgostini entre 2006 y 2007 y consta de tres tomos encuadernados en tapa blanda. Están basados en la recopilación americana, de ahí que tienen el mismo diseño interior. Las portadas originales se reproducen al final de cada tomo y en versión reducida.

La segunda salió en el coleccionable Batman - La Leyenda (Salvat), también se compone de tres tomos y tiene los mismos contenidos y distribución, pero están encuadernados en tapa dura y tienen un dibujo en el lomo que forma parte de un dibujo más amplio. En este caso, las portadas se reproducen en su tamaño original.

La edición de Salvat es ligeramente más barata, ya que todos los tomos cuestan 12,99 euros, mientras que el tercero de Planeta salió por 13,95. Además, estos tomos se pueden comprar por poco más de 9 euros en la tienda de Salvat durante el Black Friday, al menos mientras queden existencias. En cuanto a los tomos de Planeta, pueden ser aún más baratos comprándolos de segunda mano.

miércoles, octubre 23, 2019

[Comentados] Crisis en Tierras Infinitas (1)

Crisis on Infinite Earths es una serie limitada de 12 números que se publicó entre 1985 y 1986 para celebrar el 50º aniversario de DC Comics. Está realizada por el guionista Marv Wolfman y el dibujante George Pérez con la participación de Dick Giordano y Jerry Ordway como entintadores.

Antes de su lanzamiento, se allanó el terreno con las apariciones del Monitor y Presagio en multitud de cómics, si bien en ningún momento quedaba claro quiénes eran realmente y cuáles eran sus intenciones. La primera aparición del Monitor, aún entre las sombras, se dio The New Teen Titans nº 21, con fecha de julio de 1982, lo que evidencia la antelación con la que se preparó el proyecto.

El título hace referencia a las "crisis", unas historias en las que los superhéroes de Tierra-Uno se encontraban con los personajes de otras tierras paralelas. La mayoría de estas aventuras se publicaron desde los años 60 en la serie Justice League of America, donde una vez al año la Liga de la Justicia se unía a la Sociedad de la Justicia para afrontar una amenaza. Se pueden encontrar en los tomos Crisis on Multiple Earths, de los cuales de los tres primeros están editados en castellano.

Sin embargo, el origen del multiverso es un poco anterior a la primera "crisis", ya que salió en la historia El Flash de dos mundos (The Flash nº 123, septiembre de 1961). Ahí se explica que el Flash actual (Barry Allen) y el de la Edad de Oro (Jay Garrick) viven en tierras paralelas justificando así la duplicidad de velocistas. De igual forma, en la historia ¡El origen secreto de los Guardianes! (Green Lantern nº 40, octubre de 1965), se explica que el Linterna Verde de la Edad de Oro (Alan Scott) reside en Tierra-Dos, mientras que el actual (Hal Jordan) lo hace en Tierra-Uno.

A diferencia de Tierra-Uno, donde estaban las versiones modernas de los personajes y otros de nuevo cuño, en Tierra-Dos estaban los personajes prescindibles y con los que se podía acometer todo tipo de cambios. Por ejemplo, el veterano Superman (Kal-L) se casó con Lois Lane en Action Comics nº 484 (junio de 1978), mientras que el Superman moderno (Kal-El) seguía soltero. O Batman, que se casó con Catwoman e incluso tuvo una hija que, ya de mayor, adoptó la identidad de Cazadora.

Uno de los problemas de DC durante décadas fue la falta de continuidad, consecuencia de la nula coordinación entre los autores, lo cual llevaba a incoherencias como que la Atlantis de Aquaman no parecía ser la misma que se veía en los cómics de Aquaman. A esto se añade que algunos guionistas, como Bob Haney, prescindían hasta de una coherencia mínima desarrollando casi un "universo" propio. Así, por ejemplo, Batman se encontraba con el Sargento Rock... en la época de la Segunda Guerra Mundial; o con Wildcat... que vivía en Tierra-Dos. Wolfman, consciente de todos estos errores, consideraba que había que hacer un borrón y cuenta nueva. Y pretendía hacer esto con la más grande de las "crisis".

Crisis en tierras infinitas se ha reeditado en multitud de ocasiones, tanto en EE.UU. como en España, donde fue publicada en formato grapa por Ediciones Zinco y en tomo por Norma Editorial, Planeta DeAgostini y ECC Cómics. Concretamente, Planeta editó una edición en formato Absolute, que también recopila la miniserie History of the DC Universe, un "episodio perdido" realizado a posteriori y contenidos extra en forma de comentarios de los autores, etc.

ECC lanzó la edición XP, que además de la serie limitada recoge todos los cómics que se cruzan, en mayor o menor medida, con este evento. También una edición Booket, en formato bolsillo.


Crisis on Infinite Earths nº 1

Portada. Es una ilustración a doble página que muestra infinidad de planetas Tierra siendo destruidos por las olas de anti-materia, mientras en el espacio intentan sobrevivir multitud de personajes conocidos y de nuevo cuño. La mayoría vienen de Tierra-Uno, si bien alguno es del futuro (Estrella del Alba, miembro de la Legión de Super-Héroes) o del pasado (el mago Arión). Otros, como Kal-L, vienen de Tierra-Dos, y alguno, como Firebrand, incluso del pasado de dicha tierra. También aparecen Alexander Luthor y los miembros del Sindicato del Crimen, que proceden de Tierra-Tres. Y aquellos que son de nueva creación son Paria, que aparece lamentándose por lo que ocurre; Presagio, que observa la situación con firmeza, y el Monitor, de quien se aprecia su rostro entre las estrellas.

Página 1
El multiverso.

Se muestra el nacimiento del multiverso. Se apunta que el universo "debió ser único", pero que terminó multiplicándose, y esto es uno de los temas que se desarrollan posteriormente en la serie. También se indica que las tierras paralelas vibran, en consonancia con lo que se explicó en la historia El Flash de dos mundos (The Flash nº 123, septiembre de 1961).

Páginas 2-3

Paria aparece por primera vez mientras presencia la destrucción de una tierra paralela por una energía que, posteriormente, es denominada ola de anti-materia. Explica que se ve arrastrado a atestiguar la destrucción de cada tierra y que ya han sido destruidas otras anteriormente.

Páginas 4-8

La ola de anti-materia llega a Tierra-Tres. Esta versión retorcida de la tierra apareció por primera vez en Justice League of America nº 29 (agosto de 1964) y desde entonces poco se sabe más allá de que está dominado por el Sindicato del Crimen, que es la versión maligna de la Liga de la Justicia. Sin embargo, en este comic vuelve a aparecer el superhéroe Alexander Luthor, quien debutó en DC Comics Presents Annual nº 1 (septiembre de 1982). En esta segunda aparición destaca por tener un hijo (Alex) con su esposa Lois Lane. Antes de ser destruidos por la anti-materia, Luthor y Lane ponen a su hijo en una nave espacial que escapa del universo. La secuencia remite a la clásica despedida de Jor-El y Lara antes de la destrucción del planeta Krypton.

Página 9

La nave de Alex llega a Tierra-Uno, concretamente al satélite de la Liga de la Justicia de América. El cuartel general está destruido como consecuencia de un reciente enfrentamiento con los marcianos blancos. El estado arrasado del satélite también se puede ver en Batman and the Outsiders nº 22 (junio de 1985).

Páginas 10-13

Aparecen el Monitor, de quien aún se mantiene el misterio de su aspecto, y Lyla, también conocida como Presagio, quien se divide en multitud de versiones de sí misma que son enviadas a las tierras paralelas. Estos dos personajes habían aparecido en varios cómics anteriores a la publicación de Crisis On Infinite Earths con el fin de generar expectación sobre lo que se estaba preparando. Sin embargo, en aquellas ocasiones no se dio pistas sobre la temática de la serie.

Páginas 13-14

Presagio llega a Ciudad Gorila, en Tierra-Uno, donde recluta Solovar. Se trata del rey de una sociedad de gorilas inteligentes, entre los que destaca el malvado Gorila Grodd, un villano habitual de Flash.

Páginas 15-16

Presagio ficha a Estrella del Alba, miembro de la Legión de Super-Héroes, y originaria del planeta Starhaven. La acción también transcurre en Tierra-Uno, pero en el siglo XXX.

Páginas 16-17
Presagio recluta a Firebrand.

Presagio consigue la alianza de Firebrand, quien vive en los años 40 de Tierra-Dos. Firebrand debutó en Justice League of America nº 193 (agosto de 1981), donde también lo hizo el grupo All-Star Squadron. Las aventuras de este equipo transcurren en la época de la Segunda Guerra Mundial de dicha tierra.

Durante esta secuencia un ser, que posteriormente es denominado demonio sombra, observa a Presagio.

Páginas 18-19

Presagio recluta a Blue Beetle. Este personaje es originario de la editorial Charlton, la cual fue adquirida por DC Comics a mediados de los años 80. Su primera aparición como parte del Universo DC se da precisamente en este número de Crisis, donde también se cataloga su mundo como Tierra-Cuatro. Otros personajes de Charlton son Capitán Átomo y The Question.

De nuevo en Tierra-Uno, pero en la época de Atlantis, una de las copias de Presagio busca al mago Arión, aunque antes es poseída por el demonio sombra que ha aparecido poco antes.

Páginas 20-21

En Tierra-Dos, pero en el presente, Presagio convence al Psico-Pirata a unirse a la causa. El villano está en un centro psiquiátrico enloquecido por usar la Máscara de la Medusa. Este personaje, el segundo en hacerse llamar así, debutó en Showcase nº 56 (junio de 1965).

Páginas 21-22

De vuelta a la época de Atlantis en Tierra-Uno, Presagio consigue reclutar a Arión, si bien este se resiste hasta el punto de lanzar un hechizo sobre la emisaria del Monitor. Arión debutó en Warlord nº 55 (marzo de 1982) y protagonizó una serie regular que, pese a transcurrir en parte en paralelo a Crisis, no se cruzó con este evento.

Páginas 23-24

También en Tierra-Uno, pero en el presente, Presagio, acompañada por el Psico-Pirata, busca la ayuda de Firestorm, a quien pilla combatiendo a Killer Frost. El Psico-Pirata manipula la actitud de Frost, quien se enamora repentinamente de Firestorm e insiste en ir con ellos.

Páginas 26-27
Primera aparición completa del Monitor.

En el satélite del Monitor aparecen todos los personajes vistos anteriormente y otros que ha reclutado Presagio fuera de escena. Están Cíborg (de los Nuevos Titanes), Geor-Fuerza (de los Outsiders) y Green Lantern (John Stewart), de Tierra-Uno; Superman (Kal-L) y Obsidian (de Infinity Inc.), de Tierra-Dos; y los villanos Psimon y Polaris.

Por entonces, Hal Jordan no ostentaba el puesto de Linterna Verde porque renunció a ello en Green Lantern nº 181 (octubre de 1984) y era John Stewart quien tiene el anillo de poder.

Página 28-31

Una multitud de demonios sombra atacan por sorpresa para todos, quienes creen que es cosa de Presagio. Finalmente, con la aparición del Monitor los agresores se marchan.

Página 32

El Monitor se deja ver por primera vez a cuerpo completo.

Las imágenes están extraídas de la edición de Zinco publicada en 1987.

sábado, octubre 12, 2019

Top Ventas: 1986

Septiembre 1986

Daredevil vol. 1 nº 28 (Forum).

  1. The Uncanny X-Men
  2. Web of Spider-man
  3. Crisis On Infinite Earths
  4. Who's Who in the DC Universe
  5. Alpha Flight
  6. The New Mutants
  7. The New Teen Titans 
  8. The Amazing Spider-man
  9. Tales of the Teen Titans 
  10. The Mighty Thor
  11. The Avengers
  12. Peter Parker, The Spectacular Spider-man
  13. Spider-man Index
  14. G.I.Joe
  15. Iron Man
  16. Marvel Age
  17. Daredevil
  18. ... 


Fuente: Capital Comics.
Información publicada en Daredevil vol. 1 nº 28 (Forum, 1985).

viernes, octubre 11, 2019

Top Ventas: 1990

Febrero 1990


  1. Legends of the Dark Knight nº 4
  2. Batman nº 444
  3. Detective Comics nº 611
  4. Justice League Europe nº 11
  5. Justice League America nº 35
  6. Superboy nº 1
  7. Action Comics nº 650
  8. The New Titans nº 63
  9. Superman nº 40
  10. Time Masters nº 1
  11. Green Arrow nº 29
  12. Green Lantern Emerald Dawn nº 3
  13. Legion of Super-Heroes nº 4
  14. Adventures of Superman nº 463 
  15. Batman Year Two TP 
Fuente: ? 
Información publicada en ? (Zinco, ?) 

jueves, octubre 10, 2019

Cosas que quedaron en nada (9)

Batman vol. 2 nº 43 (Zinco).
En las publicaciones de Ediciones Zinco se solía incluir la sección DC News, donde se publicaban noticias sobre DC Comics con información proporcionadas por la propia editorial americana. En una entrega de dicha sección publicada en 1990 se anunció un cómic titulado The Seventh Generation.

Siguiendo la estela de Crisis en tierras infinitas (1986-1987), Legends (1987), Millenium (1988) e ¡Invasión! (1989), La Séptima Generación debía ser el nuevo crossover que afectaría a todo el Universo DC. Sin embargo, esta serie nunca se llegó a publicar por razones desconocidas. Finalmente, en 1990 no se lanzó ningún evento, si bien en 1991 salieron dos (La guerra de los dioses y Armagedón 2001).

Pero ¿qué pasó con La Séptima Generación? No se volvió a saber más de este proyecto e incluso hoy en día, si rebuscamos en Internet, no parece haber rastro de ello. Es como si nunca hubiese existido. Así pues, tendremos que conformarnos con la escasa información que publicó Zinco e imaginar de qué podría haber tratado.

miércoles, agosto 21, 2019

Guía de Batman: Reborn

Última actualización: 23 de octubre de 2019

LA BATALLA POR LA CAPUCHA 

Batman: Battle For The Cowl #1-3 (mayo-julio 2009)

Especiales:

Arkham Asylum
Azrael: Death’s Dark Knight nº 1-2
Commissioner Gordon
Gotham Gazette: Batman Dead
The Network
Man-Bat
Oracle: The Cure
Underground

BATMAN RENACIDO 

Nuevas etapas: 

Batman #687 (agosto 2009)
Detective Comics #854 (agosto 2009)

La serie Batman fue encomendada al guionista Judd Winick, quien anteriormente ya había trabajado con el personaje, pero en esta ocasión solo permaneció cinco números. El primer capítulo fue dibujado por Ed Benes, mientras que los siguientes contaron con un Mark Bagley recién llegado de Marvel. En estos pocos episodios se desarrollaron algunos cabos sueltos de Battle For The Cowl. Tras la salida de Winick, Tony Daniel se convirtió en el autor completo de la serie, si bien su estancia se vio interrumpida constantemente por episodios escritos por Grant Morrison y algunos crossovers.

Detective Comics fue asignada a Greg Rucka, un guionista que también había escrito antes las aventuras del Hombre Murciélago, aunque en este caso se centró en los personajes de Batwoman, que protagonizaba la historia principal, y The Question, que aparecía en otra de complemento. Anteriormente, Rucka había desarrollado a Renee Montoya en la propia Detective Comics y en 52, así como creo a Batwoman para dicha serie semanal. Esta nueva etapa se extendió desde el número 854 hasta el 863 (mayo de 2010) destacando los capítulos de Batwoman dibujados por J. H. Williams III.  

Nuevas series: 

Batman and Robin #1 (agosto 2009)
Batman: Streets of Gotham #1 (agosto 2009)
Batgirl #1 (octubre 2009)
Gotham City Sirens #1 (agosto 2009)
Red Robin #1 (agosto 2009)

Batman and Robin fue el buque insignia de esta nueva etapa, ya que es donde Grant Morrison siguió adelante con su etapa. Al principio se anunció que la serie estaría dibujada por Frank Quitely, pero debido a su dificultad para cumplir con las fechas de entrega se ocupó solamente de los tres primeros números. A partir de ahí llegaron otros artistas: Philip Tan, Cameron Stewart, Andy Clarke, Frazer Irving... eso sí, Quitely se mantuvo como portadista hasta el número 16, el último escrito por el escocés.

Paul Dini, que había sido el guionista de una interesante etapa en Detective Comics, abandonó este título con motivo de Reborn, pero pasó a contar con una serie propia: Streets of Gotham. Ahí retomó la trama argumental del villano Silencio, siempre acompañado por el dibujante Dustin Nguyen, por lo que se puede considerar una prolongación de la anterior etapa. Al mismo tiempo, se reencontró con su creación Harley Quinn en Gotham City Sirens, así como Catwoman, que desde hacía unos meses no tenía serie propia, y Hiedra Venenosa. Eso sí, mientras que Dini escribió los 21 números de Streets of Gotham, solo se ocupó de los 11 primeros de Gotham City Sirens.

Generalmente, el logotipo de Batman: Reborn se mantuvo en portada durante cuatro meses, concretamente entre los cómics fechados como agosto y noviembre de 2009. Sin embargo, la serie de Batgirl se estrenó más tarde y solo lució este rótulo durante tres números, entre octubre y diciembre de este año. Dio la casualidad de que al mismo tiempo Marvel publicó Captain America: Reborn, que tenía el mismo título y una temática similar, en el sentido de que el protagonista murió y había sido sustituido por su pupilo.

Series canceladas:

Robin #183
Nightwing #153

La serie de Nightwing fue cancelada, ya que Dick Grayson abandonó esta identidad y pasó a protagonizar otros títulos como el nuevo Batman. De igual forma, la colección de Robin fue cerrada y sustituida por Red Robin, en consonancia con el cambio de identidad de Tim Drake y la evolución de este personaje.



EDICIONES ESPAÑOLAS

Batman: Battle For The Cowl #1-3 - Batman nº 31-32
Especiales de Battle For The Cowl - Batman: La batalla por la capucha: Compendio
Batman #687 - Batman nº 31-32
Batman: Streets of Gotham - Batman: Calles de Gotham

Planeta DeAgostini publicó la etapa de Winick en Batman vol. 2 nº 32-34. Se prevé que próximamente ECC la reeditará en la colección Batman Saga. Los cómics de Rucka también fueron publicados, pero en un libro dedicado a Batwoman, el cual omitía las historias de The Question, y del que solo se han reeditado los episodios dibujados por Williams III en el coleccionable DC Comics. Novelas Gráficas (Salvat).

La serie Batman and Robin se publicó también en Batman vol. 2, tanto la etapa de Morrison como las siguientes historias con guiones de Peter Tomasi, Paul Cornell y Winick. Concretamente, la de Morrison ha sido reeditada por ECC en varias ocasiones, incluyendo el coleccionable Batman. La leyenda (Salvat).

Planeta publicó completa la serie Streets of Gotham en tres tomos. También editó en este formato las series de Batgirl y Red Robin, aunque el último tomo de ambas fue publicado por ECC. En cambio, de la serie Gotham City Sirens solo sacó dos tomos dejando inéditos la mayoría de los episodios, si bien años después ECC la recuperó íntegramente en un par de libros.

ECC Cómics lanzó la primera recopilación en tomo de esta saga en la colección Batman Saga. Se trata de dos libros que contienen: Gotham Gazette: Batman Dead, Battle for the Cowl nº 1-2, Azrael: Death’s Dark Knight nº 1-2, Oracle: The Cure, Commissioner Gordon, Man-Bat

lunes, agosto 19, 2019

[Reseña] Batman: La caída del Caballero Oscuro - Prólogo

La caída del Caballero Oscuro - Prólogo (ECC).
Guion: Doug Moench, Chuck Dixon
Dibujo: Jim Aparo, Michael Netzer, Tom Grindberg
Portada: Kelly Jones
Edición española: ECC Ediciones, 2018. 29,50 euros.
Contiene Batman núm. 484-490 USA, Detective Comics núms. 654-658 USA.

★ ★ ★ ★  Me ha gustado

Se suele decir que la primera mitad de la década de los 90 fue la peor en la historia de la industria del comic americana y, aunque en buena parte es verdad, también lo es que en el caso de DC las tendencias de la época apenas hicieron mella en sus publicaciones. Así es que mientras que en Marvel despedían a guionistas con gran solera, como Chris Claremont o Louise Simonson, a la vez que daban el poder creativo a dibujantes hot, como Jim Lee o Rob Liefeld, las series de Batman estaban en manos de autores de corte clásico: Doug Moench, Chuck Dixon, Jim Aparo... debido a esto, los cómics de esta época del Hombre Murciélago estaban más próximos a los estándares de los 80 que a los de la turbulenta década de los 90. Curiosamente, mientras que los alardes creativos de aquellos dibujantes galácticos han envejecido mal, el estilo aparentemente desafasado de Aparo ha aguantado mejor el paso del tiempo.

SINOPSIS: Batman está agotado. Ante la mirada atónita de Robin y Alfred, el defensor de Gotham City recurre a la Dra. Kinsolving y a sus métodos revolucionarios mientras cede el manto de Caballero Oscuro al imprevisible Jean-Paul Valley. Por supuesto, la amenaza de villanos como Máscara Negra, el Acertijo o el General no contribuye a mejorar su estado, uno del que quieren aprovecharse Bane y sus secuaces para colocar a nuestro héroe aún más contra las cuerdas.

Aún con todo, es evidente que los crossovers de la competencia, cada vez más habituales como populares, llevaron a los responsables de la batfranquicia a organizar su propio gran evento. Y es que si se revisan los años anteriores, lo cierto es que apenas hubo algún pequeño cruce, como A Lonely Place of Dying (1989) o Destroyer (1992), y de consecuencias muy comedidas. Esto iba a cambiar en 1993 con Knighfall, una gigantesca saga que aspiraba a ser un punto y aparte en la historia del personaje. Oficialmente, comenzó en Batman nº 492 y terminó en el 500 de dicha serie, pero cubrió además los números contemporáneos de Detective Comics y Shadow of the Bat. Por si fuera poco, previamente los dos principales títulos del Hombre Murciélago prepararon el terreno mostrando al héroe en un estado de agotamiento, así como el entrenamiento de Jean Paul-Valley, recién introducido en la serie limitada The Sword of Azrael, y los movimientos del villano Bane, también presentado poco antes en Vengeance of Bane.

En estos cómics previos de Batman y Detective los guionistas aún se centraban en contar las historias que ellos mismos tenían en mente, independientemente del gran evento que estaba a la vuelta de la esquina. Así es, por ejemplo, que Moench recuperó al villano Máscara Negra, creado por él mismo durante una etapa anterior como escritor de la serie, dándole una importancia que, debido a los acontecimientos de Knighfall, quedó en nada, ya que apenas se pudieron desarrollar. Al mismo tiempo, Dixon aportó un nuevo personaje a la galería de villanos: el pequeño estratega Ulysses Armstrong, quien también se quedó sin espacio para nuevas apariciones, si bien lo encontró poco después en la serie Robin. Si se atiende al guion en particular, estas historias, sin ser nada del otro mundo, están bien escritas. El problema, eso sí, es que no es lo mismo que estén dibujadas por el siempre competente Aparo que por alguno de los artistas que a continuación se describen.

Porque también hay que evidenciar que el dibujo de estos números en particular sufren cierto acercamiento a las tendencias de los 90. La pareja Tom Grindberg y Trevor Scott hacen los dos primeros episodios de este tomo, quienes simulan claramente el estilo de Mike Mignola con algunos rasgos característicos de la época, como los dientes apretados. Objetivamente hablando, el resultado es espantoso. Ya no solo es que el dibujo entra mal por los ojos; es que la narración es torpe. Y se nota especialmente cuando se llega al tercero, dibujado por Aparo, el cual es un soplo de aire fresco. Se aprecia, por cierto, un exceso de sangre... pero esto no es cosa del artista, sino del guionista, y no debe sorprender porque por entonces aún estaba muy reciente la influencia de obras con violencia explícita, como Dark Knight Returns. De todas formas, lo peor llega con Michael Netzer: con un estilo poco agraciado, se ve la peor versión de la máscara de Batman: más que orejas puntiagudas, parece lucir unos cuernos. Por último, también está Tom Mandrake, un dibujante veterano con un estilo peculiar, el cual desarrolló sobre todo en The Spectre y Martian Manhunter, para disfrute de quienes gustan del juego de luces y sombras. Desgraciadamente, el artista hace aquí un trabajo desangelado.

Es curioso que el estilo de dibujo recargado se refleja en Batman en estos números previos a Knightfall y no durante la saga propiamente dicha, pese a que se suele asociar con los peor de los 90. Tal vez esto se deba a que el editor, Dennis O'Neil, dejó para esos números a artistas más talentosos, como Norm Breyfogle, Graham Nolan o Mike Manley. También se podía deber a decisiones poco afortunadas, porque cuesta entender que se acierte de pleno eligiendo a portadistas como Michael Golden (un par de portadas de este tomo están hechas por él) y se tropiece con otros ilustradores, como el excesivo Sam Kieth o un Travis Charest noventero.

LA EDICIÓN ESPAÑOLA

La portada de este tomo puede inducir a error, ya que corresponde a la de un número que no está aquí recopilado. Se debe entender como una portada que, simplemente, transmite una idea relacionada con la saga (la liberación de los pacientes de Arkham).

Este libro tiene cierta importancia para el lector español, ya que incluye un buen montón de números de Batman y Detective Comics inmediatamente anteriores a la saga Knightfall, los cuales sirven para allanar el terreno a dicha historia y que, hasta ahora, estaban inéditos en nuestro país.

Oficialmente, Knightfall comenzó en Batman nº 492, ya que en portada luce el rótulo de esta saga y el número 1, pero fue en varios cómics previos donde se dieron algunos hechos más o menos importantes para entender dicha saga. Así es que Jean-Paul Valley debutó en la serie limitada The Sword of Azrael (octubre de 1992 a enero de 1993), Bane hizo lo propio en el especial Vengeance of Bane (enero de 1993)... y en paralelo salieron los cómics contenidos en este libro, en los que se presentó un Batman agotado física y sicológicamente,  así como se introdujo a la doctora Shondra Kinsolving e hicieron varias apariciones los mencionados Valley y Bane. Sin embargo, estos cómics no solían ser reeditados por DC Comics y, por extensión, tampoco por las editoriales españolas.

Ediciones Zinco los dejó inéditos para ir directamente a la saga propiamente dicha, Planeta DeAgostini se basó en la edición americana donde tampoco se incluían... Por suerte, la política de DC ha cambiado: las actuales reediciones intentan ser lo más completas posibles, independientemente de la calidad de los cómics, y ECC, que se basa en dichas reediciones, puede lanzar la recopilación más íntegra de Knightfall. Aun así hay que pegarle un tirón de orejas a la editorial española.

Si la serie limitada de Azrael y el especial de Bane salieron originalmente en paralelo a estos cómics, deberían haber sido reeditados junto a estos, es decir, en este libro titulado Volumen 0 - Prólogo. En lugar de esto, ECC los sacó en el primer tomo de la colección. Seguramente, no estaba planteado editar este material previo e inédito, y fue solo a raíz del éxito que la editorial se animó a publicarlo. Es por esto que se produce un error de coordinación: el lector que compre Volumen 0 - Prólogo se encontrará con que aparecen Valley y Bane sin explicación de quiénes son.

miércoles, marzo 20, 2019

[Reseña] El Hombre de Acero

El Hombre de Acero (ECC).
Guion: Brian Michael Bendis
Dibujo: Ivan Reis, Jason Fabok, Evan Shaner, Steve Rude, Ryan Sook, Kevin Maguire y Adam Hugues
Portada: Ivan Reis
Edición española: ECC Ediciones, noviembre de 2018. 19,95 €.
Contiene The Man of Steel nº 1-6.

★    No me ha gustado nada

Brian Michael Bendis lo ha conseguido: con solo los seis números de The Man of Steel ya puede ser considerado uno de los peores guionistas de Superman. Entra en una lista que incluye a otros escritores, como Jeph Loeb, Brian Azzarello o Scott Lobdell, que por desidia o falta de talento hicieron unos trabajos espantosos con este personaje. Tampoco es de extrañar teniendo en cuenta que sus mejores cómics (Alias, etc.) quedan cada vez más lejos y en los más recientes (Nueva Patrulla-X, etc.) ya mostraba síntomas de agotamiento. Había esperanza en que con el cambio de aires recuperaría la creatividad de antaño, pero desde luego no ha sido así en estos primeros cómics de Superman.

SINOPSIS: ¡Ideal para nuevos lectores! El aclamado guionista Brian Michael Bendis (Torso) lidera una nueva era para Superman, que arranca con el despertar de una antigua amenaza, destinada a destruir al Hombre de Acero. Mientras Superman lucha por entender lo sucedido con [SPOILER], tendrá que lidiar con un enemigo cuyo único deseo es arrasar Metropolis. ¡Primera entrega dibujada por la megaestrella Ivan Reis (La Noche Más Oscura)! Tras renovar el universo de Marvel Comics durante más de dos décadas, Brian Michael Bendis, ganador de varios premios Eisner, icono del cómic independiente, reconocido como uno de los mejores guionistas de superhéroes de la historia, se une a la familia de DC Comics. ¡Y lo hace a lo grande, tomando las riendas de la franquicia del Último Hijo de Krypton! ¡Acompañado de artistas de la talla de Ivan Reis, Jason Fabok, Evan Shaner, Steve Rude, Ryan Sook, Kevin Maguire y Adam Hughes!

La llegada de Bendis a DC Comics generó altas expectativas, después de que este guionista había sido el principal arquitecto del Universo Marvel durante años, y más aún por ocuparse del mismísimo Superman. A esto también contribuyó DC Comics concediéndole una serie limitada, de título The Man of Steel, que remitía a la mítica miniserie realizada por John Byrne en 1987 hasta el punto de que el logotipo es casi idéntico. Sin embargo, el parecido entre las dos obras es inexistente, más allá del mencionado rótulo. Aquí Bendis no reinicia la continuidad de Superman y respeta lo acontecido en las series de Dan Jurgens (Superman: Action Comics, 10 números) y Peter Tomasi (Superman, 24 números). Entonces, ¿a qué viene este logo? A nada en particular.

Hay que recordar que este Superman y su esposa Lois Lane son los mismos personajes que existían en el viejo Universo DC, quienes sobrevivieron al flashpoint gracias que habían sido secuestrados (véase Convergencia), tuvieron un hijo (Jon) y llegaron finalmente al Nuevo Universo DC. ¿Confuso? Es normal. Pero hay que tenerlo en cuenta o, al menos, los guionistas deberían tenerlo en cuenta. El problema está en que estas cosas le vienen grande a Bendis... y se nota. Porque, por ejemplo, si este Superman piensa en su planeta Krypton debería hacerlo en aquel que hubo hasta los cómics de 2011, el que idearon Geoff Johns y Kurt Busiek y que remitía a las películas de Richard Donner: un mundo gélido y cristalino, un Jor-El de pelo blanco y una larga túnica gris... En cambio, si Superman piensa en Krypton y le vienen a la cabeza la versión que hubo entre 2011 y 2016, es evidente que es un error de continuidad. Pues eso es lo que pasa en este comic: que Superman se reencuentra con cierto personaje de Krypton, quien luce un atuendo que no es propio de la versión que él conoce... y ni se inmuta.

En general, a Bendis no se le dan bien las historias de superhéroes, menos aún respetar la continuidad. Porque si ya se equivocaba en Marvel, ¿cómo no lo va a hacer en DC? Sin embargo, parece ser que ni él mismo es consciente de su déficit de conocimiento de los cómics y aquí plantea que la destrucción de Krypton fue cosa de un individuo llamado Rogol Zaar... como si esto fuera algo novedoso. Alguien debería haberle advertido de que esto ya lo hizo J. M. Straczynski en Superman: Tierra Uno, lo cual puede estar bien en una historia alternativa pero no tanto en una historia que se supone canónica. Así es que la brillante idea para empezar esta etapa es introducir a un tipo que se parece a Terrax, que no hace nada que no se haya visto recientemente... y que, básicamente, se dedica a romper cosas y a liarse a puñetazos con Superman. Si pensabas que Juicio Final es un personaje con una pobre caracterización, espera a conocer a Rogol Zaar.

Mientras tanto, hay una subtrama que trata sobre unos incendios en Metrópolis, en la que se implica una jefa de bomberos...  Presumiblemente, esto se desarrollará en los números de Action Comics y Superman que Bendis escribe a continuación, pero ¿por qué meter aquí esta subtrama? No está relacionada con la llegada de Rogol Zaar, tampoco desemboca en nada ni está a la altura de unos cómics que, se supone, deben ser impactantes para captar nuevos lectores. Todo lo relacionado con la bombera y los incendios sobra, directamente. Puedo entender que introduzca esta trama menor en las series regulares, pero en una serie limitada que, aparentemente, pretende ser épica... desentona.

Por último, hay una tercera línea argumental de la que se va sabiendo a cuentagotas y que aspira a crear una gran sorpresa en el último número. Es la parte en la que a Clark, Lois y Jon se les aparece una ¿nave? de la que sale un misterioso individuo, quien tiene planes para el chaval. Esto no estaría mal si no fuera porque no se explica cómo ha llegado este personaje, no se demuestra que realmente sea él... y porque Lois, en lugar de negarse a dejar marchar a su hijo con un desconocido, quien se supone que está muerto y aquí está vivo, pero le falta un ojo... se desmelena y se va con ellos. Al parecer, su única preocupación es que tiene que escribir un libro y así le vendrá alguna idea. ¿Cómo un guionista puede pensar que este es un comportamiento razonable en Lois Lane? Está todo tan mal escrito.

En definitiva, la llegada de Bendis es decepcionante y está muy lejos de las expectativas que pudo haber generado. Solo cabe esperar que mejore en la etapa en Action Comics y Superman y que poco a poco le coja el punto al personaje y su entorno.

LA EDICIÓN ESPAÑOLA

ECC Ediciones ha lanzado dos ediciones de The Man of Steel. La primera es una serie limitada de seis números en formato grapa. La segunda es un tomo recopilatorio que se caracteriza por que las portadas originales se han reproducido en un póster extraíble.

viernes, marzo 15, 2019

[Reseña] Nuestros Mundos en Guerra

Nuestros Mundos en Guerra nº 1 (ECC).
Guion: Jeph Loeb, Joe Kelly, Joe Casey, Peter David y otros
Dibujo: Ed McGuiness, Mike Wieringo, Doug Mahnke, Kano, Leonard Kirk, Ron Garney, Pasqual Ferry y otros
Portada: Jae Lee
Edición española: ECC Ediciones, enero de 2019. 42,5 €.
Contiene Superman núms. 171-173, Adventures of Superman 593-595, Superman: The Man of Steel 115-117, Action Comics 780-782, Supergirl 59, JLA: Our Worlds At War, Impulse 77, Superboy 91, Wonder Woman 172-173, Young Justice 36, World's Finest: Our Worlds at War

★ ★   No me ha gustado

Los buenos cómics no solo tiene un buen guion o un buen dibujo, también tienen una buena organización. Y cuando se trata de un evento, esto es fundamental. Hay eventos que afectan solo a una familia de series en particular, pero hay otros que trascienden de sus límites y alcanzan a todo el Universo DC. La noche más oscura, por ejemplo, surgió de los acontecimientos que había tenido lugar en las páginas de Green Lantern, y dado que el argumento tendía a afectar a todos los personajes de la editorial, terminó saliendo en una serie limitada propia, a generar multitud de crossovers y especiales... Sin embargo, la organización del evento fue perfecta. Si el lector solo quería seguir la serie limitada en cuestión, ahí tenía todo lo necesario. Si además quería saber cómo afectaba a Hal Jordan y sus compañeros, para eso estaban Green Lantern y Green Lantern Corps. Y si tenía curiosidad por ver cómo la trama afectaba al resto de personajes, podía hacerlo con las series limitadas de Batman, de Superman, de Flash... La organización era tan buena que un lector de Batman o Detective Comics podía seguir fielmente sus series sin ver entorpecidos los argumentos en curso, ya que el evento no afectaba a la mayoría de títulos. En cambio, cuando la organización de un evento no es buena, la historia se resiente. Y esto es lo que le pasa a Nuestros Mundos en Guerra.

SINOPSIS: Superman, la JLA, las amazonas y Atlantis se preparan para plantarle cara con la ayuda de un aliado improbable: el mismísimo Darkseid. Pero ¿qué pacto ha firmado el señor de Apokolips con Lex Luthor, el presidente de Estados Unidos?

Allá por 1999 Jeph Loeb empezó a escribir la serie Superman y en los tres primeros números introdujo a un personaje llamado Imperiex, quien desde el principio apuntaba a ser un gran villano. El nombre era grandilocuente, el diseño recordaba la estética kirbyriana... Superman, con ayuda de Mongul, lo derrotaba, pero al término de la saga se revelaba que, en realidad, se trataba solo de una sonda, de un "mini-Imperiex", y que el auténtico y grandioso villano aún estaba ahí. En 2001 la trama  se resolvería definitivamente en una saga titulada Our Worlds At War, si bien anteriormente se habían dado algunos hechos que allanaron el terreno, como la llegada de Lex Luthor a la Casa Blanca o que el D.O.E. se llevara el cuerpo de Mongul. Parecía que todo estaba formaba parte de un plan. Que todo estaba atado y bien atado.

Por entonces, Superman protagonizaba cuatro series regulares, por lo que la saga se desarrolló en estas pasando por varios equipos creativos. Comenzó con Superman nº 171 de Loeb y Ed McGuiness, siguió con Adventures of Superman nº 593 de Joe Casey y Mike Wieringo... así sucesivamente. Y debido a la magnitud de la historia, se extendió durante tres meses, o sea, un total de 12 números. A esto hay que añadir números de otras series (Impulse, etc.) e incluso números únicos (JLA: Our Worlds At War, etc.) donde también se reflejó lo que estaba aconteciendo. Así es que lo que empezó como una trama en Superman terminó cubriendo en mayor o menor medida todo el Universo DC. La historia lo justificaba, ya que Imperiex amenazaba con destruirlo todo y la Tierra se aliaba con otras fuerzas cósmicas, como Darkseid.

Desgraciadamente, la organización y el desarrollo del evento es un desastre. Hay tantos problemas que cuesta enumerarlos todos.

Primero: hay demasiados equipos creativos. En Crisis en tierras infinitas, en Leyendas... son historias que pueden gustar más o menos, pero son cómics hechos por un equipo creativo que están de principio a fin dándole una homogeneidad a la obra. El problema de Nuestros Mundos en Guerra que pasa por muchas manos. Hay demasiados guionistas, hay demasiados dibujantes... hay demasiados cambios de estilo. Y si a esto se añaden los números extraídos de otras series y los números únicos, la sensación de heterogeneidad es mayor. Evidentemente, es difícil encontrar un dibujante que lo haga absolutamente todo. Pero, tal vez, hubiera sido mejor una serie limitada con la trama principal y que estuviera realizada íntegramente por los mismos autores dejando las series regulares de Superman para tocar aspectos secundarios. Por ejemplo, Lois Lane escribiendo notas sobre cómo está llevando esta guerra planetaria.

Segundo: la coordinación entre las series regulares es pésima. Lo normal sería que la historia pasara de una serie a otra de forma natural, que se sintiera como un todo... Pero no es así. Cada episodio parece romper con lo anterior, como si tuviera una historia propia que contar. Por ejemplo, el tercer capítulo (The Man of Steel nº 115) comienza con que los ciudadanos de Metrópolis han sido abducidos... pero en el anterior (Adventures of Superman nº 593) no se sugiere nada así. Se pasa de una página donde Lois Lane habla con su padre a plena luz del día a otra en la que ella, Clark y otros muchos han sido transportados a una nave extraterrestre mientras estaban durmiendo. No hay fluidez entre los capítulos. La coordinación es tan mala que el tercer capítulo termina con Superman en solitario frente a Darkseid... y el cuarto empieza con Superman acompañado por la Liga de la Justicia. ¿En qué momento han aparecido?

Tercero: Loeb... lo hace todo mal. El primer capítulo de la saga (Superman nº 171) es una buena muestra del desastroso trabajo de este guionista. Lo normal sería pensar que este número debería crear ambiente, introducir al villano... Por ejemplo, se podía haber empezado con una página del espacio profundo en la que se viera "algo" aproximarse hacia la "cámara" dejando al lector con la incógnita de qué se trata. Así hasta que en la última página se retomara esa secuencia, solo que ahora se aclararía que se trataba de Imperiex. Pero no. Aquí Loeb pierde el tiempo con una historia intrascendente, cuya única finalidad parece ser la de que McGuiness se divierta dibujando a los Cinco Fatales. Lo gracioso es que hasta el tercer capítulo no se señala que el villano es Imperiex, donde Mark Schultz ni se preocupa por explicar quién es, tampoco por poner una imagen en flashback para que el lector pueda ver al villano. Al parecer, los lectores que se han subido al carro con motivo del evento deben saber quién es y qué aspecto tiene. Esto se nota aún más cuando se lee en formato tomo, como es el caso, ya que aquí no se contienen aquellos tres primeros números que escribió Loeb.

Cuarto: sobran subtramas. En el primer capítulo Superman termina diciendo "¿Para qué habrá destruido Brainiac 13 un planeta entero? ¿Para sacarme de la Tierra?" Pues... no se sabe. No parece haber una respuesta clara, más allá de que a Loeb le apetecía poner a Superman en el espacio. En el segundo capítulo se sugiere que hay unas revueltas en el país ficticio Pokolistán, en el cuarto Lex Luthor encomienda a Superman a que vaya a Berlín porque ha sido atacado por "el General" de Pokolistán, a quien ya conoce... de nuevo, pasa que el lector recién llegado no entiende nada, ya que esto viene de un número anterior (Action Comics nº 779). Todo para meter un enfrentamiento con el General Zod y... ¿para qué? No aporta absolutamente nada. En el segundo capítulo se forma un Escuadrón Suicida liderado por Manchester Black, quien dice que tiene la misión de probar "algo"... ¿qué es ese "algo"? Chi lo sa. También dice que ya se puede liberar a Mongul. ¿Y para qué? Unos capítulos después sale Mongul tirado en tierra y aparentemente muerto... ¿para qué había que liberarlo? ¿Por qué los guionistas creen que es una buena idea lanzar incógnitas y no despejar ninguna? ¿A qué huelen las nubes?

Quinto: hay momentos anticlimáticos. Utilizar a Juicio Final como "arma de destrucción masiva" contra Imperiex está bien, pero... ¿era necesario anunciarlo en portada? ¿Hacía falta ponerlo en el título del comic (El protocolo Juicio Final)? Debe ser la sorpresa menos sorprendente del mundo. Peor aún: cuando aparece Juicio Final lo hace de una forma desangelada, en unas viñetas con un tamaño normalito... Si había un momento para poner un dibujo a página completa, era este. Porque la aparición de Juicio Final debería ser algo realmente impactante. Por otra parte, qué decir de las muertes que se producen: es difícil hacerlas menos dramáticas. ¿A quién le importará que maten a x personaje, si aún no lo había visto en toda la saga y puede que ni sepa quién es?

Hay tantas cosas mal, tantas cosas que se podían haber hecho mejor... Sobran los discursos de los antiguos Presidentes de los EE.UU., esos textos que no enriquecen la historia y que, seguramente, los lectores terminarán ignorándolos de lo aburridos que son. Al final, los mejores episodios de esta saga son los dos de Wonder Woman que hace Phil Jimenez, los cuales sí transmiten la sensación de dramatismo y de épica que deberían caracterizar una historia como esta, que además son coherentes consigo mismos. Y que tenga que venir una serie ajena a ofrecer lo mejor de un evento de Superman... tiene narices.

LA EDICIÓN ESPAÑOLA

Esta historia fue publicada por Norma Editorial en Las aventuras de Superman: Mundos en Guerra, por Planeta DeAgostini en la colección Universo DC: Superman y por ECC Ediciones en Nuestros Mundos en Guerra. Sin duda, esta última es la mejor edición española que se ha hecho de la saga.

Este libro recopila los números correspondientes de las cuatro series de Superman, así como episodios de Supergirl, Wonder Woman, Young JusticeImpulse relacionados con el evento y los especiales JLA y World's Finest. Está encuadernado en tapa dura, respeta el formato original y reproduce las portadas originales. Cabe señalar que ECC está reeditando la etapa de Loeb en la colección Un nuevo milenio y que en el tomo 5 (Regreso a Krypton) hay un salto entre un episodio y otro... esto se debe a que en ese hueco va Nuestros Mundos en Guerra. Es decir, en lugar de publicar el evento como parte de esa colección de Superman, ECC la ha extraído para dedicarle un tomo propio.

En cuanto a las otras dos ediciones, la de Norma es aceptable. Se centró en el material de Superman y los dos especiales omitiendo los cruces de Supergirl, etc., aunque los de Wonder Woman al menos salieron en el libro Paraíso Perdido. Consta de cuatro tomos en tapa blanda que, actualmente, se pueden conseguir a buen precio, por lo que es una opción económica para acceder al grueso principal de esta historia.

Respecto a la edición de Planeta, también es una opción a tener en cuenta. Eso sí, es una edición de bolsillo, así es que... Concretamente, salió entre los tomos 3, 4 y 5 de esta colección con el inconveniente añadido de que en el 3 hay episodios previos y en el 5 episodios posteriores, por lo que si uno quiere sola y exclusivamente la saga en cuestión tiene que pagar por otros cómics. Como Norma, aquí se incluyen los dos especiales, pero también los dos números de Wonder Woman.

Por último, decir que también salieron especiales de Nightwing, JSA, Flash, Batman, Wonder Woman, Green Lantern, Young Justice, Harley Quinn e incluso un Secret Files and Origins. De este material, el de Batman salió en la colección La sombra del murciélago (Norma) y en un Grandes Autores - Ed Brubaker (ECC). El de Wonder Woman también salió en un Grandes Autores - Phil Jimenez (ECC). El de Harley Quinn lo hizo en Noche y día (ECC). El resto, salvo error, está inédito en España. 

martes, marzo 12, 2019

El logotipo de Batman que nunca se debió usar

Entre 2005 y 2011 la licencia de DC Comics para España estuvo en manos de Planeta DeAgostini. Durante aquel primer año la editorial apenas pudo publicar algunas obras puntuales, y en lo que se refiere a Batman en particular solo salieron dos coleccionables coincidiendo con la película Batman Begins (2005).

Batman nº 635 y Batman nº 10 (PdA).
Hubo que esperar a 2006 para, por fin, tener una serie regular de este personaje, la cual se caracterizó por salir en formato tomo, por recoger un número de cada título (Detective Comics, etc.), por un peculiar olor... y por no mantener el logotipo que, originalmente, aparecía en esos cómics. El packager, Funthunter, hizo un diseño un tanto atípico, ya que no tenía nada que ver con el que salía en las ediciones americanas.

Como se puede ver en la comparativa de las portadas de Batman nº 635 y Batman nº 10, el diseño de la edición española es totalmente diferente del original. Los americanos usaban un logotipo diseñado por Chris Gardner en el que se veía de forma enigmática a Batman y la capa extendida, y que era un actualización de otro de los años 60, mientras que Fanhunter se sacó de la manga un logo escorado en la esquina superior izquierda, a lo que se añadía la numeración en la esquina inferior. Evidentemente, el dibujo (en este caso, de Matt Wagner) estaba hecho pensando estarían en una deteminada posición... pero no en que en una edición española se inventarían una composición totalmente distinta.

En lo que se refiere a las otras series contemporáneas, como Detective Comics o Gotham Knights, estas presentaban diseños propios, pero en la edición española eran igualmente omitidos. Por ejemplo, la portada de Detective Comics nº 790 (marzo de 2004) fue adaptada en Batman nº 1 sustituyendo el logotipo original por este de Fanhunter.

Esta colección de Planeta solo duró 12 números, ya que fue cancelada con motivo del relanzamiento conocido como One Year Later, terminando así la breve trayectoria del "logo escorado".

Batman nº 655 y Batman nº 1 (PdA).
En 2007 Planeta publicó los primeros números de esta nueva etapa en el tomo Batman: Un año después, el cual respetó el logotipo original. Sin embargo, cuando la editorial lanzó una serie regular en formato grapa, de nuevo reincidió en el absurdo: en portada aparecía un logotipo de Batman que no era propio de estos cómics. Se trataba de uno inspirado en las películas Batman Forever (1995) y Batman and Robin (1997) y que, aunque se utilizó en los cómics entre 1995 y 1999, no se había vuelto a usar desde entonces.

En este caso, el desastre fue mayor si cabe: mientras que en la edición americana el logo se adaptaba en cada comic al coloreado de la portada, en la edición española este logo de los 90 siempre tenía el mismo aspecto. Daba igual que hubiera un fondo de color rojo o gris que Planeta utilizaba el logo con el mismo aspecto. Solo en los números 31 y 32, en los que se recogía el arco La batalla por la capucha, eliminaron el murciélago, presumiblemente por la falta de espacio.

Batman and Robin nº 1 y Batman nº 35 (PdA).
Este logo estaba en desuso desde los 90, remitía a dos películas poco apreciadas por los seguidores del Hombre Murciélago... tenía un aspecto casi metálico y en relieve que en su momento sería rompedor pero, visto hoy en día, era hasta excesivo. Curiosamente, en Planeta nadie debía darse cuenta del error y persistían en ello todos los meses. Las minimalistas portadas de Frank Quitely en los números que recopilaban Batman and Robin se veían empañadas por un logotipo que llegaba como un elefante a una cacharrería.

En Planeta no solo no veían el error, sino que además lo ponían en el resto de cómics de la época: en Vida después de la muerte, en Arkham Renacido... allí donde había que poner solo un "batman" en portada, ahí estaba el logo de los 90. Algunas series, como Calles de Gotham, se escaparon, seguramente porque el texto era más extenso y se hubiera tenido que modificar el logo.

Durante este periodo que va de 2007 a 2012 el editor en Planeta fue David Hernando, quien anteriormente había escrito el libro teórico El resto es silencio, en el que se puede apreciar el uso de la misma fuente (batman forever), así es que... ¿tal vez fue una decisión propia basándose en el aparente aprecio que tenía por este logo? Probablemente, el uso indiscriminado de este logo se debió a la comodidad para el packager de poner siempre el mismo, independientemente de que la portada viniera de un Batman, de un Batman and Robin... En cualquier caso, es evidente que las portadas en su edición original lucen mejor que en la española.

jueves, febrero 28, 2019

Cómics comentados: Universo DC: Renacimiento

En esta serie de entradas comentaré el comic Universo DC: Renacimiento. Evidentemente, si aún no ha leído este comic, te recomiendo que no sigas leyendo, ya que aquí hay SPOILERS.


Universo DC: Renacimiento (ECC).
Portada. El dibujo muestra a los principales personajes del Nuevo Universo DC abalanzándose a tocar la mano de un individuo desconocido. Casi parece un ser divino. De él salen rayos que iluminan a los superhéroes, lo cual se puede relacionar con el enfoque de Rebirth, que fue anunciado como un intento de recuperar el optimismo después de cinco años oscuros (The New 52). Fijémonos en que Batman y Superman ya lucen los trajes que vestirán en esta nueva etapa, mientras que otros personajes, como Wonder Woman aún llevan los trajes previos.

Capítulo 1

Página 1. Hay una voz en off que narra el comic. El texto aparece en cuadros de color amarillo y rojo, lo que ya hace sospechar a quién corresponde. La página muestra una sucesión de viñetas que muestran un reloj desde fuera hasta adentrarse en sus engranajes.

Una nota advierte de que este comic se sitúa justo después de Liga de la Justicia nº 53 y Superman nº 55. En caso de no haberlos leído, el lector se enterará de lo que ha pasado porque en Universo DC: Renacimiento se habla explícitamente sobre ello.

Páginas 2-3. Sigue la voz en off mientras caen rayos y relámpagos sobre la ciudad de Gotham. En la Batcueva, Batman observa imágenes del recientemente fallecido Superman (véase la historia Los últimos días de Superman)

Página 4. Ahora, Batman ve unas imágenes del Joker, de quien cree que hay tres versiones al unísono, como se reveló en la historia La guerra de Darkseid. Estos dibujos del Joker representan las versiones de los dibujantes Jerry Robinson, Brian Bolland y Greg Capullo. Concretamente, la primera es una adaptación de la portada de Detective Comics nº 69 (noviembre de 1942).  

El narrador señala que después de años intentando volver, ha sido ahora cuando lo ha conseguido, después que "la puerta" se abrió tras la muerte de Darkseid.

Páginas 5-7 Los pensamientos de Batman son interrumpidos cuando caen unos rayos y aparece Wally West vistiendo el traje de Kid Flash. Antes de Flashpoint, Wally fue Kid Flash e incluso llegó a heredar el puesto de Flash durante muchos años, ya que Barry Allen había desaparecido. Sin embargo, cuando el Universo DC se reinició después de dicho evento, no se supo nada de él. Como señala, aparenta ser más joven que lo que debería ser.

Páginas 8-9. Wally se refiere a una carta, que es la que Barry le dio a Batman al final de Flashpoint. Durante este evento, se creo temporalmente una nueva continuidad en la que Thomas Wayne le dio a Barry una carta de despedida para su hijo. Wally, que no puede conservar el contacto con Batman, es arrancado y devuelto a la corriente de la Fuerza de la Velocidad.

Páginas 10-13. Mientras cae, literalmente, a través de esta corriente, Wally recuerda momentos de su pasado: cuando conoció a Barry y se convirtió en un velocista, cuando fundó los Jóvenes Titanes... Son momentos extraídos de varios cómics. La viñeta en que Wally sale de un hospital con un informe médico, mientras el cielo tiene un aspecto rojizo, no corresponde a ningún comic en particular, pero sí es cierto que abandonó los Jóvenes Titanes por una enfermedad (véase The New Teen Titans nº 39, de 1984). En cambio, la viñeta en que sujeta el traje vacío de Flash y en la que se lo pone, no son interpretaciones: están extraídas directamente de Crisis en tierras infinitas. Hay tres viñetas que están tomadas de The Flash nº 100 (abril de 1995), hasta el punto de que se nota que Ethan Van Sciver ha homenajeado los dibujos de Óscar Jiménez. La viñeta que muestra a Barry de vuelta rodeado de varios velocistas viene de Flash: Renacimiento, dibujado por el propio Van Sciver. Las siguientes viñetas representan lo acontecido en Flashpoint, mientras Wally revela que la creación del Nuevo Universo DC no se debió a las acciones de Barry, sino a que fue un ataque de otro individuo. Aquí se justifica el rejuvenecimiento de los personajes: "Alguien nos robó 10 años".

Capítulo 2

(en construcción)

miércoles, febrero 27, 2019

[Reseña] Héroes en Crisis nº 1

Héroes en Crisis nº 1 (ECC).
Guion: Tom King
Dibujo: Clay Mann
Entintado: Clay Mann
Portada: Clay Mann
Edición española: ECC Ediciones, marzo de 2019. 2,75 euros.

★ ★ ★ ★  Me ha gustado

He llegado a esta obra casi de forma casual, sin haber leído previamente sobre ello y, por tanto, sin expectativa alguna sobre lo que me podía encontrar. A veces es lo mejor: no estar condicionados por declaraciones de los autores, por los anuncios de la editorial... y permitirnos disfrutar a nuestro ritmo. Si acaso, el título, Héroes en Crisis, incita a recordar las "crisis" del Universo DC, y el hecho de que está escrito por Tom King, uno de los guionistas clave en la actualidad, hace pensar que será un gran evento. Debo decir, eso sí, que justo después de leer este primer número he visto un anuncio en la revista ECC Cómics donde se señala que... bueno, que pasará algo importante. Peor aún: en la sinopsis que aparece abajo se dan datos que, solo leyendo el primer número, no se conocen. Así es que me tocará leer el resto de esta serie limitada habiendo recibido cierta influencia desde la editorial. Parece que es casi inevitable en estos tiempos que corren.

SINOPSIS: Santuario es un centro secreto de recuperación destinado a superhéroes traumatizados tras años de lucha contra el crimen y sucesos cósmicos. Es un lugar de reposo y reflexión. Sin embargo, algo ha alterado la paz de Santuario. Cuando un asesinato múltiple tiene lugar en el recinto, dos de sus residentes, Booster Gold y Harley Quinn, se convierten en los principales sospechosos. ¿Podrán descubrir Batman, Superman y Wonder Woman el origen de este brutal crimen? En la tradición de Crisis en Tierras Infinitas, Crisis Infinita, Crisis de Identidad o Crisis Final, un nuevo evento reúne a todos los iconos del Universo DC. Todo empieza con una pregunta impactante, con un hecho en el que nadie ha reparado hasta la fecha o que nadie se atrevía verbalizar: ¿cómo afronta un superhéroe el trastorno de estrés postraumático, provocado por tantas situaciones al borde de la muerte?

En lo que se refiere a este primer número, nos encontramos con una portada bastante llamativa: muestra a un amplio elenco de personajes del Universo DC, los cuales están cabizbajos y lamentándose por la aparente muerte de alguien, a quien debe pertenecer la máscara que Superman tiene entre las manos, además de una prenda que parece manchada de sangre. Por cierto, mi primer pensamiento fue que podría ser la máscara del Psico-Pirata. En cierto modo, esta portada me recuerda a la primera de Crisis de identidad, aquella en la que se veía un ataúd y personajes llorando por la muerte de alguien. Hacía pensar en quién sería la víctima, quién sería el asesino...

Entre los personajes están los típicos, aunque destaca la presencia de Wally West (un personaje que ha ganado en importancia desde Universo DC: Renacimiento), Mr. Milagro y Big Barda (seguramente, por ser los protagonistas de otra obra de King), pero, sobre todo, la de Booster Gold y Harley Quinn en primer plano, incluso por delante de Batman o Wonder Woman.  Es llamativo que Harley es la única que no está triste. A todo esto, podemos apreciar que el escenario parece un campo de maíz y que, al fondo, se ve una casa... ¿podría ser Smallville?

En general, este comic provoca cierta confusión, si bien es de suponer que a medida que la historia avance se irá esclareciendo. Para empezar, tiene una estructura un tanto atípica, ya que hay dos tramas que transcurren en paralelo (la de Booster-Harley y la de Superman), que parecen acontecer después de unos hechos que desconocemos, mientras se intercalan unas entrevistas a otros personajes, que, presumiblemente, transcurren en algún momento del pasado. Entre estos entrevistados aparece la propia Harley, pero también otros héroes menos conocidos como Blue Jay. Justo detrás de cada uno de ellos se ve un escudo que, personalmente, me recuerda al del Guardián, aunque parece formar la letra ese... seguramente, la ese del Santuario, que es señalado en la sinopsis y que también se menciona puntualmente a lo largo de este comic.

En definitiva, tenemos un buen montón de incógnitas, entre que aparece un escenario nuevo, que hay una víctima y un supuesto asesino... Por lo pronto, no se prevén cielos rojos, así es que no estaríamos ante una "crisis" cósmica de las que dejan la continuidad torcida, y sería un relato más intimista en la línea de la mencionada Crisis de identidad. Sin embargo, es difícil asegurarlo habiendo leído un solo número y, salvo por el dichoso anuncio de ECC Cómics, desconociendo todo lo qué pasará. Hay que atento al guion de King, que coge cuerpo a medida que pasan las páginas, aunque al principio puede parecer un tanto vago.

EDICIÓN ESPAÑOLA

De momento, la única edición disponible en España es una serie limitada de nueve números en formato grapa. Presumiblemente, en el futuro saldrá una edición en tomo encuadernado con tapa dura.