[Reseña] Batman: La última cruzada

Guion: Frank Miller y Brian Azzarello

Dibujo: John Romita Jr. 

Portada: John Romita Jr.

Edición: ECC, abril de 2019. 14,95 euros.

Contiene Batman: The Dark Knight Returns: The Last Crusade

★  No me ha gustado nada

La última cruzada es el enésimo intento de explotar la saga de Dark Knight Returns. En este caso se trata de una historia que muestra los hechos que llevaron a la desaparición de Batman: el agotamiento físico, la sensación de vejez... y la dramática pérdida de Robin. Si bien todo esto se trata en la mencionada obra, la muerte del Chico Maravilla había quedado en el aire, es decir, no se explicitaba cómo y en qué circunstancias había fallecido. Y ese hueco es el que viene a cubrir este comic. 

En su momento, El regreso del Caballero Oscuro fue una historia ubicada en un futuro próximo y que perfectamente podía considerarse el final del personaje. Su influencia fue tan importante que las series regulares, ambientadas en la continuidad normal y corriente, adoptaron algunos elementos que conectaban con ese mundo: la muerte de Jason Todd en Una muerte en la familia, el traje de Robin expuesto en la Batcueva... Al mismo tiempo, también hay que decir que Frank Miller se basó en los elementos que había disponible por entonces, de ahí que tuvo en consideración a Dick Grayson y a Jason Todd, pero no a Tim Drake, ya que este personaje fue creado años después. Así es que unos y otros se retroalimentaron. Pero con el paso de las décadas, lo de Miller casi se puede considerar un mundo independiente, que no tiene que estar atado a lo que dice la continuidad... la cual, por otra parte, ha sufrido varios reinicios en todo este tiempo. En definitiva, es comprensible que el autor quiera dar su propia versión de cómo murió Jason. 

Desgraciadamente, más allá de esto, hay poco que comentar sobre este comic. Porque la historia no es apasionante, tampoco tiene diálogos que marquen... Es una lectura anodina. Con el propio Miller y Brian Azzarello como guionistas, cabe pensar que contaría con un buen guion. Pero no es así. Va a lo fácil: recuperar la estética de la obra original (el diseño del Joker, etc.), mostrar un Batman agotado y a un Robin agresivo... y poco más. Desde luego, nada que no se haya visto antes. 

Al final tenemos un comic que, cómo no, despierta cierto interés por retomar una saga que marcó a muchos lectores, pero que seguramente decepcionará a más de uno. 

Por cierto, el Killer Croc que aquí aparece tiene la misma estética que el que salía en la historia Ciudad rota, escrita por Azzarello. Habría que preguntarse hasta qué punto este comic es realmente de Miller.